MONTERREY, NL – SKF invertirá 68 millones de dólares en la construcción de una nueva planta en Monterrey, Nuevo León, donde producirá componentes para vehículos eléctricos y comerciales, con el objetivo de reducir su dependencia de las importaciones.
El fabricante sueco de rodamientos informó en un comunicado que la nueva fábrica apoyará el desarrollo estratégico en el continente americano; además, atenderá las necesidades de los clientes conforme aumenta el enfoque en la electrificación.
SKF, que ya cuenta con instalaciones en Nuevo León, fabricará en la nueva planta productos para los mercados de vehículos eléctricos y trenes motrices de vehículos comerciales, de rápido crecimiento e importancia estratégica en Norteamérica, así como una gama de productos para aplicaciones industriales.
La empresa estimó que las primeras líneas de producción en Monterrey abrirán a mediados de 2023, e informó que especialistas de SKF de América, India, China y Europa participan en el incremento de la tecnología y competencia de la fábrica.
David Johansson, presidente de la división Automotriz de SKF, comentó que esta inversión es un paso importante para fortalecer la capacidad dentro de los segmentos de vehículos eléctricos y comerciales en Norteamérica.
El directivo indicó que, con esta nueva instalación, están asegurando una cadena de suministro regional que complementa sus capacidades existentes en Europa y Asia.
Johansson destacó la ubicación de Monterrey, ya que está cerca de muchos de sus clientes y socios en México; además, cuenta con canales logísticos desarrollados hacia los principales centros de distribución en Estados Unidos.