Métodos alternativos de venta le dieron respiro a la venta de autos durante mayo

4 junio, 2020

MÉXICO—La rápida adaptación del consumidor para la compra de vehículos en línea y vía telefónica permitió que las distribuidoras de vehículos ligeros presentaran un mejor panorama en ventas de autos durante mayo, a pesar de mantener cerrado los pisos de comercialización por la pandemia del COVID-19, informó Guillermo Rosales, director de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).

El sector automotor esperaba un panorama más desolador en cuanto a la menor venta de autos en mayo donde se esperaba una caída de hasta 90%. Sin embargo, de acuerdo a cifras del INEGI se comercializaron 42,028 unidades. Sin embargo, ante la inactividad económica y la necesidad del consumidor por adquirir un auto, las empresas procedieron a realizar campañas de comercialización electrónica con promociones, así como la venta a flotillas y el personal de las mismas agencias permitió “un respiro” a la industria.

“La venta de vehículos ligeros en mayo estuvo condicionada por el aislamiento social motivado por la contingencia sanitaria ante el COVID-19 que obligó a las distribuidoras de automotores a cerrar sus pisos de venta”, explicó Rosales.

Esta circunstancia motivó a que sólo se pudieran comercializar vehículos a través de la combinación de canales de venta a distancia (atención telefónica, redes sociales, sitios web) y atención domiciliaria.

Pese a ello, marcas como Toyota, Nissan, Peugeot, FCA, General Motors, Kia, entre otras, hicieron lanzamientos de modelos 2020 para conquistar a sus clientes, así como planes atractivos de financiamiento y promociones en la compra.

Rosales añadió que la continuidad del cierre de los pisos de venta de las distribuidoras en la mayor parte del país, incluyendo las entidades federativas de mayor venta de vehículos, como es la Ciudad de México, Estado de México y Nuevo León, seguirá impactando negativamente la comercialización de vehículos.

Los distribuidores de automotores mantienen su solicitud al gobierno federal para ser incluidos como parte de la cadena productiva de la industria automotriz y que la comercialización de vehículos sea considerada actividad esencial para poder abrir los establecimientos.

Fuente: El Economista