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General Motors (GM) invertirá 4 mil millones de dólares (mmdd) en los próximos dos años en algunas de sus plantas de manufactura ubicadas en territorio estadounidense para incrementar la producción tanto de autos de gasolina como de vehículos eléctricos.
Parte de esta capacidad será destinada al ensamble de al menos tres modelos que la automotriz de Detroit actualmente fabrica en sus plantas de Ramos Arizpe, Silao y San Luis Potosí, aunque de momento se desconoce hasta qué grado se verán afectadas estas operaciones.
La compañía dijo que una vez consolidadas estas inversiones, destinadas a operaciones en Michigan, Missouri y Tennessee, su capacidad de producción en el vecino país superará los dos millones de unidades anuales.
De acuerdo al anuncio, la planta de Orion Township, Michigan, que se encontraba en proceso de reconfiguración para producir vehículos eléctricos, ahora será destinada al ensamble de pickups y SUVs de tamaño completo con motorización a gasolina.
Con este cambio, la producción de las versiones cero emisiones de las camionetas Chevy Silverado, GMC Sierra y Cadillac Escalade, así como de la Hummer EV en versiones pickup y SUV, será concentrada en la planta Factory Zero, ubicada en los límites de Detroit.
En el caso de la planta Fairfax Assembly, ubicada en Kansas City, este sitio comenzará a fabricar SUVs Equinox de motor a gasolina a partir de mediados del 2027. Esto sin abandonar el plan de iniciar operaciones de ensamble de la nueva generación del Chevrolet Bolt EV a finales de este mismo año.
GM agregó que la inversión destinada a Fairfax también le permitirá la producción de su “próxima generación de vehículos eléctricos asequibles”, sin dar mayores detalles.
Finalmente, la planta de manufactura ubicada en Spring Hill, Tennessee, comenzará a producir camionetas Chevy Blazer de motor a gasolina en el 2027, al tiempo que continuará con el ensamble de la Cadillac XT5, igualmente de combustión interna, así como de los vehículos eléctricos Lyriq y Vistiq, también de la marca Cadillac, como hasta ahora.
Paul Jacobson, director financiero de GM, dijo que este nuevo plan de inversiones fue ideado en respuesta a las políticas tanto arancelarias como ambientales del presidente Donald J. Trump, las cuales han propiciado una mayor demanda de vehículos a gasolina y un declive en la de modelos cero emisiones.
Este anuncio se da a un par de semanas de que GM difundiera otro plan para destinar 888 millones de dólares a una planta en las cercanías de Buffalo, Nueva York, para la producción de un motor V8 de nueva generación.
En los primeros cinco meses del presente año, la automotriz estadounidense ha producido 362 mil 497 unidades en las tres plantas de ensamble que opera en el país. Dicha cifra supera apenas en mil 300 vehículos al resultado del mismo periodo del 2024, es decir un 0.36%.
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