Develan Puntos de Encuentro en Cumbre Automotriz

21 octubre, 2024

    Carlos Arredondo/HorsePower

    Ciudad de México— La primera edición de la México Drive Forward Summit, organizada por la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), fue un punto de encuentro con un matiz que deja entrever lo que quizá será una nueva dinámica de entendimiento entre el sector público y privado durante el sexenio que apenas comienza.

    Si bien existen temas que han generado desconfianza en el sector privado dentro y fuera del país, como la reforma al sistema judicial que la nueva administración lleva a cabo, uno de los mensajes que prevaleció es que existen coincidencias y oportunidades para trabajar por objetivos comunes.

    La cumbre inició con el panel La Industria Automotriz, Motor de México, en el que se dejó de manifiesto la relevancia de las cadenas productivas de este sector no solo para mover la economía del país, sino como potencial eje de políticas públicas para propiciar el desarrollo.

    Este diálogo contó con la participación de la titular del Inegi, Graciela Márquez Colin; Rodrigo Centeno, director ejecutivo de Nissan México; Daniel Hernández, presidente de la Red Nacional de Clústeres y de Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE). 

    Fue éste último, la primera de varias voces durante la jornada, en reconocer que, debido a las expectativas que está generando el país en el contexto económico global, existe interés por parte de la nueva administración en dar certidumbre a las inversiones.

    El Día Previo

    Francisco Cervantes trajo a la mesa los avances del CEO Dialogue, un encuentro que el CCE y su contraparte, la U.S. Chamber of Commerce, han instrumentado desde el 2013 entre los directivos de las empresas más importantes de México y Estados Unidos, cuya edición 2024 se celebró un día antes del México Drive Forward Summit, con la participación de 240 ejecutivos.

    A este espacio acudió la doctora Claudia Sheinbaum, acompañada de su gabinete económico, con varios planteamientos bajo el brazo, entre los que destacaron tres: que tras la reforma judicial prevalecerá la certidumbre para la inversión; que habrá espacio para la participación privada en el sector energético y que se abrirá una “ventanilla única” para dar celeridad a asuntos regulatorios, a fin de que cada inversión que se anuncie pueda materializarse más rápido.   

    Cervantes destacó que en dicho evento se acordaron mesas para revisar las inquietudes que existen no solo en torno a la reforma judicial, sino también en los temas energético, laboral, financiero y de infraestructura, en particular del rezago en los cruces fronterizos.

    El titular del CCE mencionó también la conformación de una comisión en el Senado para dar seguimiento a la implementación del TMEC, cuya titularidad recayó sobre Waldo Fernández, legislador de Nuevo León por el partido Morena cuya trayectoria incluye importantes cargos en el área jurídica de Cemex, al que calificó como un perfil “muy pro-negocios”. 

    Desarrollo Basado en Datos

    Para abonar al tema de cooperación, Graciela Márquez Colin pidió a los presentes estar atentos a los resultados del Censo Económico 2024 que serán publicados en enero próximo, ya que será una herramienta fundamental para la toma de decisiones de todo tipo, desde la planeación de infraestructura hasta para identificar regiones con disponibilidad de capital humano.

    La titular del Inegi citó como ejemplo hipotético la utilidad que tendrá la información del censo para quién esté interesado en invertir en la instalación de estaciones de carga para vehículos eléctricos, ya que se podrá hacer mapeos con los datos necesarios para trazar estrategias en ese sentido.

    Daniel Hernández coincidió que la información del Inegi servirá para implementar estrategias coordinadas de desarrollo de acuerdo a las ventajas que ofrece cada región. El representante de los Clústeres criticó que la tendencia actual es que los estados compitan entre ellos por la inversión de forma casi “canibalesca”, ”abriendo en algunos casos la cartera de más”. 

    Descarbonización concertada

    En el panel Transformación Histórica de la Industria Automotriz se analizó la necesidad de concertar el rumbo de la transición energética y la electrificación de la movilidad entre sectores público y privado.

    Al respecto, José Luis Samaniego Leyva, subsecretario de SEMARNAT encargado de cambio climático y desarrollo, citó un caso en Brasil, en el que el gobierno trató de electrificar parte del parque vehicular con metas que no fueron consensuadas con la industria automotriz. La falta de acuerdos provocó oposición y esto dejó como única alternativa abrir el mercado a las importaciones.

    Este diálogo también contó con la participación de Matt Blunt; Presidente del American Automotive Policy Council (AAPC), Luis Lozano; director ejecutivo de Toyota México y Takaaki Kuga; presidente de la Cámara Japonesa de Comercio e Industria de México.

    En su intervención, Luis Lozano dijo que es posible construir políticas públicas si se ve más allá de “la necesidad del estado por regular las cosas”, y que empresas como la que preside pueden aportar la experiencia que han tenido en otros países, por tratarse de marcas globales.

    Taaki Kuga advirtió que una transición desarticulada en vez de ayudar puede impactar de manera negativa las cadenas de suministro, ya que una conversión apresurada causaría desequilibrios entre oferta y demanda no solo de productos electrificados, sino de sus componentes.

    El directivo se refirió al caso de Japón, donde a pesar de los avances tecnológicos sigue siendo un país que aún obtiene el 80% de su energía de fuentes fósiles y que más del 90% de los hidrocarburos que consume son importados. Esta alta dependencia ha hecho que el gobierno se proponga metas realistas, pues no tiene caso acelerar la electrificación del parque vehicular si esto provoca un incremento en el consumo de fósiles.

    Talento Humano 2.0

    Otro panel que contó con la participación de representantes del gobierno y donde se habló sobre oportunidades de colaboración fue el de Talento de la Industria: Formación de Capital Humano. 

    La mesa contó con la participación de Carlos Valdez, director de Recursos Humanos de Ford de México; Mónica Flores, presidente de Manpower México y Latinoamérica; Laura Ripani, Representante en México del BID y Donaciano Domínguez, titular del Servicio Nacional de Empleo.

    Fue este funcionario de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social quien explicó que de antemano ya existe un antecedente de colaboración con el sector productivo, pues de otra manera no sería posible contar con cifras sólidas en materia de empleo y de salarios.

    Sin embargo, existen todavía varias oportunidades de colaboración para identificar la disponibilidad del talento y las competencias que está requiriendo la industria. Agregó que es necesario construir juntos una radiografía de las nuevas necesidades del sector productivo para lo que está demandando la electromovilidad.

    Ahí tendrán que participar los expertos de recursos humanos de la industria de la mano del sector académico para implementar nuevos planes educativos y reconfigurar las carreras a fin de que atiendan las necesidades del momento, dijo. 

    Domínguez agregó que la dependencia a su cargo cuenta con una base de datos de 13.2 millones de personas que están buscando trabajo, de las cuales más de 11 millones ya cuentan con empleo, pero buscan una mejor opción. Ésta y otras herramientas permiten crear “un gran padrón de talento” para que la industria sepa qué puerta tocar y dónde se encuentra el capital humano que busca.

    La Carta Fuerte

    Una participación que no estaba contemplada en la agenda preliminar y se confirmó casi de último momento fue la de Altagracia Gómez Sierra, coordinadora del Consejo Asesor para el Desarrollo Regional y la Relocalización de Empresas del Gobierno de México.

    Bastaron los primeros minutos de su intervención para darse cuenta de que lleva una misión de promover un entendimiento. “Una de las principales estrategias que se requiere implementar para fortalecer el nearshoring en México es fomentar una política industrial basada en el diálogo y la colaboración entre la autoridad y los empresarios”, fue uno de sus primeros mensajes.

    La coordinadora de asesores aseguró que la industria automotriz tendrá un aliado en la nueva administración, ya que el equipo que se integró al gabinete es conocedor de los temas y problemáticas que inquietan al sector. 

    En la conversación con Odracir Barquera Salais, director general de la AMIA, la empresaria reconoció el enorme reto que el país enfrenta en infraestructura y dijo que la nueva administración está consciente de la necesidad de que el sector privado participe ya que los recursos que dispone el sector público son insuficientes.

    Gómez Sierra dijo que una posible fuente de financiamiento se encuentra en las Afores, pues cuentan con recursos equivalentes al 17% del PIB y la cifra ascenderá a 30% para el 2030. Dijo que dependerá de las administradoras de pensiones si toman o no esta oportunidad de transformar el ahorro en inversión.

    Otras áreas de interés en las que el gobierno busca colaboración, afirmó, son elevar el contenido nacional de las exportaciones, desarrollar proveedores locales y programas de banca de desarrollo para sumar a la cadena de valor empresas con menos de 90 personas.

    También dijo que habrá estrategias para duplicar programas de educación dual, carreras técnicas y certificaciones de talento específico, así como acciones dirigidas a incrementar patentes. 

    El Balance

    Algunos participantes se mostraron sorprendidos de que en pleno 2024, con una industria enfilada a cifras récord en varios sentidos, el México Drive Forward Summit fuera el primer encuentro de esta naturaleza al que asistían.

    Dichas expresiones dan la razón, sin decirlo, a voces dentro del sector automotriz que se han referido a la administración de López Obrador como un “sexenio perdido”, pues no solo faltó entendimiento, sino que esta carencia derivó en políticas abiertamente contrarias al desarrollo de la propia cadena productiva nacional.

    Cabe también señalar que esta clara intención de robustecer la relación entre gobierno y sector privado, surge de la necesidad de que los engranajes de la industria y los capitales se muevan en sintonía para hacer frente a los retos de un gobierno que inicia con fuertes presiones presupuestarias. Para eso tiene que cuidar cada centavo de inversión que aterriza en el país

    Depende ahora de todos los involucrados si se aprovecha esta coyuntura para construir acuerdos, si se dan seguimiento a los planteamientos de la cumbre o todo queda en una foto y buenas intenciones.