Nearshoring en Riesgo

2 septiembre, 2024

    Crece la inquietud entre los inversores

    Sergio L. Ornelas Sr./Editor/HorsePower

    A las puertas del cuarto aniversario de la tendencia al nearshoring, México está consiguiendo empañar la fanfarria.

    La pandemia fue un grave mal mundial que tuvo una consecuencia positiva no intencionada para México en forma del fenómeno del nearshoring. 

    En aquel momento, la larga cola de buques portacontenedores en el puerto de Los Ángeles, la escasez de chips y vehículos a la venta, junto con las pérdidas generalizadas de las empresas y la elevada inflación evidenciaban la vulnerabilidad de las cadenas de suministro mundiales.

    El nearshoring consiste en acercar las cadenas de suministro al mercado para reducir el riesgo que suponen los envíos lejanos y de larga distancia. También se trata de obtener un mayor control sobre la calidad de la producción y poder desarrollar la actividad empresarial en un entorno y zonas horarias similares.

    El conflicto comercial entre Estados Unidos y China destapó aún más razones a favor del nearshoring, ya que los aranceles recíprocos avivaron el encuentro, ya enrarecido por el secretismo militar y tecnológico.

    En realidad, el nearshoring existe desde hace décadas: las maquiladoras de México, con 50 años de antigüedad, y la ubicación de plantas japonesas de ensamblaje de automóviles desde los años 80 en territorio estadounidense son algunos ejemplos.

    Pero esta vez, las estrellas se alinearon realmente a favor de México haciendo que la tendencia al nearshoring fuera muy poderosa, atrayendo incluso a empresas chinas y de otros países asiáticos a abrir instalaciones cerca de los consumidores estadounidenses.

    México superó a Canadá en 2015 y a China en 2022 para convertirse en el principal socio comercial de Estados Unidos por un monto de 416 mil millones de dólares tan sólo en el primer semestre de 2024, incluyendo la exportación de un millón 715 mil vehículos ligeros, que junto con autopartes conforman el grueso de las exportaciones mexicanas de bienes al socio del norte. 

    Sin embargo, últimamente, ciertas condiciones negativas para la realización de negocios en México por parte de extranjeros están aumentando y dando impulso al desarrollo del nearshoring, con el presidente de México Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como principal protagonista.

    Costo Laboral

    México ha sido tradicionalmente la plataforma de fabricación de bajo costo en Norteamérica, con salarios y productividad competitivos.

    Pero de acuerdo con el Banco de la Reserva Federal de Dallas, los costos laborales en México han aumentado más rápido que la productividad de los trabajadores en manufactura y servicios desde 2019. Específicamente, los costos laborales unitarios aumentaron 1.8 veces más rápido que la productividad laboral en la industria manufacturera y 1.5 veces más rápido en los servicios sobre una base mensual promedio anual.

    El aumento de la remuneración de los trabajadores y la ampliación de las prestaciones es un beneficio que los trabajadores mexicanos deberían haber recibido hace mucho tiempo, pero sin un aumento equivalente de la productividad, es motivo de preocupación para las empresas y los consumidores.

    Y una iniciativa para cambiar la jornada laboral semanal de 48 a 40 horas se cierne sobre los legisladores. 

    Los ingresos y la calidad de vida de los trabajadores merecen atención, pero las mejoras salariales y de las prestaciones complementarias no deben ser bruscas, sino escalonadas en el tiempo, para dar espacio a la productividad para compensar y a las empresas para adaptarse.

    Además del aumento de los costos, los productores ya tienen que lidiar con elevados índices de rotación, costosas curvas de aprendizaje y una cada vez menor disponibilidad de trabajadores.

    Un costo por hora completo e integrado en México ronda actualmente los 5 dólares, de los que aproximadamente el 35% se destina a prestaciones como primas por vacaciones, Navidad, reparto de utilidades, vivienda y seguridad social. En comparación, el costo por hora de trabajo en China es de 9 dólares y el salario estadounidense sin prestaciones ronda los 23 dólares.

    De acuerdo con la Industria Nacional de Autopartes (INA), en 2024 México producirá 126 mil millones de dólares en autopartes con 890 mil empleos directos; Estados Unidos importa cerca del 44% de todas sus autopartes de México, su proveedor #1 por encima de Japón, Canadá y China.

    El Peso y la Inflación

    Al inicio de la pandemia, el tipo de cambio peso-dólar se disparó a 25 pesos por dólar, luego bajó a 16.75 dólares, ya que las altísimas tasas de rendimiento (9% – 11%) de los depósitos atrajeron al país miles de millones de dólares en inversiones a corto plazo y la fortaleza del peso se convirtió en ideal para las operaciones mundiales de cambio de divisas. Adicionalmente, las remesas anuales récord de 60 mil millones de dólares de los paisanos en Estados Unidos, que año tras año fortalecían el peso con reservas de divisas.

    Actualmente, el cambio del peso se sitúa en torno a los $19 pesos por dólar y sigue sin ser competitivo para los exportadores. Nuestro consenso es que un tipo de cambio de $20 pesos por dólar proporcionaría equilibrio tanto a los importadores como a los exportadores.

    Evidentemente, un peso fuerte es un viento en contra para el nearshoring, ya que los márgenes de los fabricantes se ven reducidos por el aumento de los costos en pesos y un dólar que no llega tan lejos en México como antes. 

    Además, una implacable inflación general del IPC del 5.57% (julio de 2024) no está ayudando a las perspectivas de crecimiento de México para el año, ahora proyectadas en el habitual crecimiento anual del PIB por debajo del 2% y un peligroso déficit público sin precedentes del -5.4% del PIB. 

    La inflación en México en 2024 es sobre todo cortesía del gasto asistencialista del presidente de 30 mil millones de dólares para adultos mayores y jóvenes desempleados en un año electoral, además de los enormes sobrecostos en los elefantes blancos del presidente: La refinería de Dos Bocas de 8 mil a 16 mil millones de dólares y el Tren Maya de 8 mil 500 a 28 mil 500 millones de dólares, por no mencionar el disfuncional nuevo aeropuerto AIFA, que sólo recuperaría el 15% (700 millones de dólares) de su costo de construcción hasta 2033.

    Además, según un informe de Dow Jones OPIS, el hecho de que México siga subvencionando las operaciones y deudas de los monopolios gubernamentales perdedores PEMEX y CFE podría costar al erario federal unos 112 mil millones de dólares al año o el 1% del PIB.

    Evidentemente, seguir por este camino supone un reto importante para las finanzas del país y, en consecuencia, para el tipo de cambio y las perspectivas de un mayor crecimiento económico del país.

    Energía

    Uno de los principales obstáculos para maximizar los beneficios del Nearshoring es la disponibilidad de energía. Los promotores industriales y los fabricantes luchan por conseguir suficiente suministro eléctrico para sus instalaciones, lo que ha provocado la cancelación o graves retrasos de nuevos proyectos y ampliaciones.

    La política energética de México no sólo está creando incertidumbre entre los inversores sobre si dispondrán de un suministro fiable de electricidad a precios competitivos y que no contamine.

    AMLO ha seguido respaldando su iniciativa energética, que limita la participación de inversionistas extranjeros en el sector energético de México a riesgo de violar el acuerdo comercial de las regiones. Si el proceso de revisión formal del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) concluye que Estados Unidos y Canadá tienen razón (ejerciendo su potencial para participar en el sector energético de México), México enfrentaría multas multimillonarias y posibles impuestos punitivos a sus exportaciones.

    Según un estudio de Morgan Stanley, 25,242 megavatios de inversores privados aún no han comenzado a construirse, ya que el gobierno incumple los contratos y crea intencionadamente retrasos burocráticos para dar luz verde a los proyectos. Si estos proyectos hubieran salido adelante, la capacidad eléctrica de México sería casi un 50% mayor que la actual.

    Dado que todo en una economía necesita algún insumo de electricidad, el costo de la energía es un factor clave en la competitividad global de un país. Por desgracia, el costo de la electricidad en México es entre un 50% y un 90% más caro que en países como Canadá, Costa Rica, Malasia, Indonesia y, sobre todo, Estados Unidos.

    AMLO parece tener un romance con el carbono. La idea de que México puede ser autosuficiente energéticamente con una estrategia basada en fósiles sólo pertenece al MetaMundo de AMLO. 

    Diversos estudios científicos sugieren que México podría llegar a ser autosuficiente energéticamente con un plan basado en fuentes de energía renovables.

    Delincuencia e Inseguridad

    La principal preocupación de los ciudadanos y las empresas de México es la inseguridad. Los mexicanos valoran la economía, la salud, la educación, la alimentación, el empleo y otras necesidades y angustias muy por debajo de la aprensión por su seguridad y los delitos relacionados.

    México encabeza la lista de países de la OCDE en cuanto a homicidios, con una tasa de 28 por cada 100 mil habitantes, superior a la de Venezuela (19.3), Estados Unidos (6.8) y Chile (3.6).

    En lugar de confiar principalmente en las fuerzas nacionales de México y en el apoyo y la inteligencia internacionales, la estrategia de AMLO para combatir al crimen organizado ha sido la de “Abrazos, no balazos”, además de haber dado ya el derecho a los militares de asumir todas las funciones de aplicación de la ley federal, incluidas todas las que deberían estar en manos de civiles.

    El problema es que muchas células de delincuencia organizada operan con bastante libertad en su mayor parte y han ampliado sus operaciones para incluir “cobro por derechos de piso” a empresas y asaltos y robos de los envíos de algunos fabricantes.

    Para las instalaciones extranjeras y nacionales, la delincuencia rampante se traduce, por supuesto, en mayores costos de seguridad en la planta y en sus maniobras logísticas, lo que disuade del impulso del nearshoring.

    Conclusiones

    El nearshoring es la mayor oportunidad de negocio que México ha tenido para alcanzar nuevos niveles en inversión extranjera directa, empleo y un fuerte desarrollo económico.

    Lamentablemente, el país no ha sido capaz de proporcionar todos los recursos adecuados para satisfacer la demanda, estimada en 200 mil millones de dólares, de inversiones en fabricación y logística en los próximos cinco años, atribuidas a la relocalización.

    Sólo hay una persona a la que culpar en México por el retroceso del nearshoring: No es de sorprender que sea el presidente del país AMLO, cuyas decisiones políticas y económicas emanan de ocurrencias, un amor desenfrenado por el carbón, un desdén por la ley y la Constitución y por supuesto una sed extrema de poder, que planea seguir ejerciendo a la sombra de la recién electa señora presidenta Claudia Sheinbaum.

    AMLO también está en la ruta de eliminar todas las agencias e instituciones independientes que son los pesos y contrapesos de la administración federal creando un ambiente generalizado de incertidumbre entre los inversionistas nacionales y extranjeros y erosionando aún más los beneficios potenciales del nearshoring.

    En pocas palabras, debido a su liderazgo, México sigue siendo su propio peor enemigo.

    Esperemos que la señora Sheinbaum sea capaz de deshacerse de su mentor AMLO una vez que asuma el cargo y cambie las políticas energéticas, de seguridad, de gasto y de estado de derecho del país para que México sea capaz de aprovechar el extraordinario potencial del nearshoring.

    Sergio L. Ornelas cuenta con más de 40 años de experiencia en comercio internacional e inversión extranjera; es graduado de Babson College, Southern Methodist University y Harvard Business School. Se desempeñó como director de Promotora de la Industria Chihuahuense e Intermex Parques Industriales. Actualmente es el editor de HORSEPOWER, MEXICONOW y BORDERNOW. Contacto: editor@mexico-now.com