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MÉXICO – Los estímulos fiscales en Estados Unidos a la compra de vehículos eléctricos, propuestos por el gobierno de Joe Biden, impulsarán la competencia de las armadoras en México y ayudarán a acelerar el mercado interno para el desarrollo y comercialización de baterías y este tipo de unidades, de acuerdo con representantes automotrices.
“Ahora con la inserción y apoyo del gobierno de Estados Unidos a la industria automotriz en Norteamérica, se generará más competencia y es previsible que muchos de los puntos críticos, que hasta ahora se han presentado para la masificación de los vehículos eléctricos, se puedan resolver en un menor tiempo”, explicó Guillermo Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Se espera que este incentivo en Estados Unidos estimule la competencia de las automotrices en México, con proyectos para electrificar sus portafolios hacia 2030, con el potencial de alcanzar hasta 9 millones de unidades y lograr al menos 50 por ciento de las ventas de autos a batería en ese país.
Rosales indicó que aunque la participación de las ventas de autos eléctricos en México aún es muy baja, el estímulo al mercado estadounidense y los planes de empresas como Tesla, BMW, Ford, Audi, Chirey y Nissan, entre otras, para producir vehículos, acelerarán el mercado de este sector en el país a partir del próximo año.
“Esto tiene un efecto muy importante que alcanza a México en sus beneficios, primero porque apoya y acompaña la inversión que están haciendo las grandes armadoras en investigación y desarrollo, lo que les permitirá entrar a la carrera que por muchos años habían liderado las armadoras chinas y alemanas”, concluyó.