MÉXICO – La empresa estadounidense ARRA llega a México para competir en el mercado automotriz con dos nuevos modelos totalmente electrificados, los cuales están siendo ensamblados en una planta en China.
Las unidades comenzarán a venderse a finales de mayo, y para finales de 2023, esperan haber colocado no menos de dos mil unidades, pues ya cuentan con una lista de espera que parece ser prometedora.
Erick Gómez, presidente de ARRA para México y América Latina, dijo que uno de los principales objetivos de la empresa es demostrar que los autos producidos en China no son de mala calidad, pues cuentan con un diseño de vanguardia.
Actualmente la empresa cuenta con 20 distribuidores, ubicados en 12 ciudades de la República Mexicana, como el Distrito Federal, Guanajuato, Querétaro, Zacatecas, Aguascalientes, Tlaxcala y Mérida, Yucatán, entre otras.
Sin embargo, como parte de los planes de la empresa, esperan cerrar 2023 con al menos 45 distribuidores.
Así, ARRA arrancará con un primer lote de 300 unidades, que será el inicio para la conformación de su inventario en el país, a fin de cumplir con su meta de vender más de 2 mil unidades en lo que resta de este año.
“Para nosotros México es la ventana a todo el mundo, es un mercado potencial que está en sus inicios en el tema eléctrico, estamos hablando de que 5 por ciento de nuestros autos que se venden actualmente en el país son eléctricos, por lo tanto, vemos un gran potencial para distribuir nuestros autos y estamos convencidos de que México nos abrirá las puertas al resto del mundo”, dijo Gómez.
Aunque los autos que ARRA traerá al país se ensamblan en China, el directivo no descartó que en un futuro esta producción se traslade a México, pero esto dependerá de las condiciones y el desarrollo de sus ventas en el futuro.