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MEXICO – México aumentó 10% su participación en el mercado de autopartes de Estados Unidos durante la última década, pero con el T-MEC se espera que eleve su posición y absorba un mayor porcentaje, al sustituir las importaciones estadounidenses procedentes de China, Alemania, Japón y Corea, señaló Óscar Albín, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
A la fecha, México es el principal proveedor de partes y componentes automotrices de Estados Unidos, con el 38% de las importaciones que realiza EE.UU., mientras que China se estancó con el 9%; Japón posee el 8.3%, Alemania 6.6% y 5.3% de Corea.
Aseguró que a medida que la regla de origen de las partes y componentes automotrices se vayan ajustando hacia un mayor contenido regional de Norteamérica, la industria mexicana será una de las grandes ganadoras, la cual comienza a notarse, ya que se estima que el siguiente año el sector esté totalmente recuperado tras el impacto del cierre de actividades por el COVID-19.
“China con toda la problemática de la política de imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, su participación ha ido a la baja y se prevé que las sustituciones de México desde China llegarán para quedarse”, afirmó.
Óscar Albín dijo que mientras Japón, Alemania y Corea tengan manufactura de vehículos en Estados Unidos, seguirán enviando autopartes; sin embargo, esa participación de los tres países irá disminuyendo proporcionalmente conforme se vayan avanzando los porcentajes requeridos del valor de contenido regional del T-MEC.
Para Estados Unidos está clara la importancia del T-MEC, porque el 47% de sus importaciones provienen de México y Canadá, y la apuesta es aumentar el contenido regional.
Fuente: El Economista