La legislación del mercado eléctrico en México aún no permite que desarrolladores de infraestructura para la recarga de vehículos detonen inversiones que incentiven el uso de unidades más sustentables.
Países como China exigen a los fabricantes que entre 3 y 4% de sus ventas sean de unidades “verdes”, una condición que México aún no podría implementar al 100% debido a la falta de infraestructura para la instalación de los centros de recarga.
“El único factor en la instalación de infraestructura pública para autos eléctricos, es la industria automotriz, no hay un actor secundario que se llame empresa de instalación de cargadores, porque la Comisión Reguladora de Energía (CRE) no permite hacer un cobro por la electricidad”, comentó Gustavo Lara Oriani, responsable de ventas y marketing de BMWi para Latinoamérica.
El especialista de BMW comentó que la industria automotriz realiza esfuerzos para impulsar el uso de automóviles híbridos o eléctricos una exigencia cada vez más fuerte para los gobiernos.
Agregó que se ha estado trabajando con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y Hacienda en reuniones interdisciplinarias de electromovilidad y una de las propuestas es cambiar la legislación para que alguien pueda poner estaciones de recarga y sea un negocio.